La mujerfuente, uno de mis personajes arquetipales femeninos, se activa haciendo presencia en la acción plástica La vaguada, porque “la lluvia la llevamos bien adentro”. Ella canta himnos desde sus entrañas y se ahoga con el agua.

 

Esta acción nace en 2005 cuando encuentro en mis archivos la noticia de una niña rescatada en la tragedia de Vargas. La pequeña se salvó porque la oyeron cantando bajo los escombros de su casa, derrumbada por las lluvias que destruyeron Macuto. Además, para esas fechas, Venezuela ya estaba colgada bajo el régimen chavista y la escucha repetitiva y obligada del Himno Nacional era una presencia agobiante en nuestra vida cotidiana. Esta es una acción en extremo angustiante, física y psico-espiritualmente, no solo para mí sino también para las personas que la experimentan.

 

 

Accioné La vaguada por primera vez para el Primer Encuentro de Arte Corporal (IARTES, 2005) en el Teatro Teresa Carreño, Caracas. Con matices de crítica ante las circunstancias, sin duda es una experiencia imponente en lo personal por las características del lugar y el público. Ese mismo año la presento en el XVI Salón Carmelo Fernández en San Felipe. A principios de 2009 la hice en el evento I.D. Performance en el Centro Cultural Chacao, Caracas. Con la ayuda de la cineasta Marilyn Birchfield registro en video esta pieza como video-performance para presentarme como artista invitado al Salón Supercable Jóvenes con FIA (2009), bajo la curaduría de Gerardo Zavarce. En de marzo de 2014, la llevo como acción colectiva al espacio público en la Plaza Altamira, Caracas, como parte de un evento de protesta creativa de un grupo de artistas invitados por el fotógrafo Carlos Ancheta.

 

Esta propuesta de performance/acción plástica forma parte de la investigación personal creativa que descubre los aspectos intuitivos y misteriosos del ser mujer. Está basada en la investigación del arte como un juego de rituales y la reorientación del cuerpo en el espacio a través de experiencias visuales y de movimiento. Un performance que se fundamenta en la curiosidad en el arte como herramienta de sanación.

 


 

Acerca de la artista:

Consuelo Méndez (Caracas, 1952). Cursa estudios universitarios en California, USA, de Licenciatura y Maestría en Artes Plásticas. Pertenece al grupo Mujeres Muralistas de SF, California, hasta 1976. Desde 1991 es artista docente asociada e investigadora del Instituto Armando Reverón y ahora docente jubilada de la UNEARTES. Ha sido galardonada por su obra plástica en el Salón Michelena (1983, 1981), Premio Municipal de Artes Plásticas de Caracas (1984) y la Bienal de Miniaturas Gráficas TAGA (2004, 1990, 1982), entre otros. Ha participado en exposiciones en países como Corea del Sur, Bulgaria, Puerto Rico, Colombia, EE. UU., Cuba, México y Polonia. Sostiene un trabajo permanente en las Artes Plásticas: pintura, dibujo y artes gráficas, a la vez demostrando un especial interés en la elaboración de libros-objeto y obra sobre papel.

 

La relación entre el cuerpo y la plástica se hace cada vez más relevante en su expresión personal y su pedagogía, marcando la pauta para su proceso de investigación creadora. Desarrolla una práctica pedagógica que integra la terapia y las artes. Pertenece al Grupo Pielforma, laboratorio de investigación cuerpo-plástica.

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